martes, 28 de abril de 2020

Nunca caminarás solo: un homenaje


Acabo de enterarme de que ha muerto Michael Robinson, el español con acento inglés de la SER. Si tuviera que ser forofo de algún equipo de futbol y como corresponde a mi calidad de ilicitano (ya se sabe: ...d’Elx i bobo, cantali un trovo) mi equipo sería el Liverpool y no solo por su hermoso himno, un canto a la fidelidad por encima de la muerte y de todo. Debería ser Patrimonio inmaterial de la Humanidad como ya es nuestro Misteri d’Elx, solo que aquí no cantamos tantos. Por eso me emocionan no las versiones edulcoradas de tal o cual cantante que hay en Youtube, sino el rugido a capela de todo un estadio. Y además son rojos.

Cuando vayas a través de una tormenta,
Mantén la cabeza alta,
Y no tengas miedo a la oscuridad;
Después de la tormenta encontrarás la luz del sol
Y la dulce y plateada canción de la alondra.

Sigue a través del viento,
Sigue a través de la lluvia.
Aunque tus sueños se rompan en pedazos,

Camina.
Camina, con esperanza en tu corazón,
Y nunca caminarás solo,
Nunca caminarás solo.


lunes, 27 de abril de 2020

Mientras tanto: materiales para pensar el Automóvil


Al automóvil le quedan 10 años como mucho
Esto hay que decirlo no en sentido literal sino como tendencia histórica que ya está en marcha. El aire y el clima se han vuelto recursos no renovables (ya desarrollaré este tema otro día) y es un auténtico despropósito que cada persona, para desplazarse unos pocos km. vaya cargado con casi una tonelada de hierro, plásticos, combustible y materiales diversos. Hasta hace poco la única opcion ecológica (respetuosa con el aire y el clima) era la bicicleta o ir andando. Con la aparición de las baterías TESLA y los sistemas de recarga se hace posible que además de la bicicleta tradicional puedan utilizarse con provecho las bicicletas eléctricas y los patinetes o motocicletas eléctricas.

Estos productos son más que competitivos con el coche o los sistemas basados en el consumo de energía fósil y el motor de explosión. (Un patinete eléctrico vale menos de 1000 €, una motocicleta 6000. Un coche 10 veces más que el mejor patinete). La dinámica de empleos precarios y la necesidad de vivir y producir en distancias cortas de forma cotidiana apunta a la progresiva sustitución de los motores de combustible fósil por los motores eléctricos de batería, sin olvidar las opciones colectivas y caminar. La gente joven, para acudir a sus obligaciones cotidianas, solo por el diferencial de precios, va a usar cada vez con mayor asiduidad el vehículo eléctrico. Somos un país con mucho sol y otras fuentes de energía limpia como la eólica. De hecho la transición a sistemas de captación y almacenamiento de energía está ya bastante avanzada, en especial desde que se suprimió (parcialmente, creo) el impuesto al sol. Los bancos tienen pillados a un montón de inversores domésticos que se decidieron por invertir en plantas de energía eólica o solar, de manera que ellos ya sabían que la transición energética iba a ir por ahí y solo se escapan del peaje impuesto aquellos que hayan decidido invertir en energía limpia pasando de los jugosos intereses que manejan las instituciones de crédito. Las opciones para la captación de energía solar y eólica son cada día más claras: tejados, viviendas unifamiliares, campos de cultivo abandonados, puntos en medio de corrientes de aire persistentes para la eólica... Si se hace pasando de los créditos es posible recuperar la inversión y obtener beneficios en un plazo relativamente corto, contando con el precio actual de la electricidad y de los combustibles fósiles. Simplificando, podemos decir que si en vez de comprarme un coche instalo una planta de energía solar en mi tejado, con una motocicleta elèctrica pasaré de gastar 30 € a la semana en combustibles fósiles, a menos de 3, durante un montón de años. Cierto es que las opciones eléctricas cojean en cuanto las distancias son medias o largas, en circuitos complejos y cada vez que el tiempo no acompaña, o como alternativa para más de una sola persona, pero eso otro día.


lunes, 6 de abril de 2020

Para leer mientras tanto 3


La ciencia es una estrategia,
es una forma de atar la verdad
que es algo más que materia
pues el misterio se oculta detrás.
Aute, De paso


Continuando con la serie del apocalipsis o casi, distopías duras en las que el género humano no sale muy bien parado, presento más madera para quien quiera tener diversión asegurada. De todas formas vaya por delante que la temática elegida no significa que quien esto suscribe crea que estamos en una catástrofe civilizatoria. Estamos en medio de una crisis, obvio, pero lamentablemente el género humano y en especial los dirigentes de verdad: multinacionales y grandes empresas, corporaciones, gobiernos, etc., van a seguir equivocándose sin cambiar el rumbo cuando la pandemia pase, de manera que nos espera volver al modo de vida anterior tras un periodo de adaptación más o menos largo, puede que incluso con medidas correctoras que en cualquier caso no van a incidir de forma decisiva en la orientación de la mal llamada civilización. Volveremos sobre este tema otro día.
Las novelas son legibles en el ordenador, algunas directamente si están en formato pdf; otras requieren alguna utilidad para la lectura en pantalla. En todos los casos se pueden pasar a los lectores de ebooks, generalmente sin problemas.

El día de los trífidos, John Wyndham:
Novela post-apocalíptica en la que lo más interesante es el muestrario de alternativas de supervivencia frente al ataque de los trífidos, unos seres de laboratorio (creados en la Unión Soviética de la Guerra fría), vegetales con rasgos de cierta inteligencia como especie, capaces de moverse y de ir eliminando a la gente. Me gustó más esta ceguera que la de Saramago, aunque literariamente no está a la altura del autor luso, porque aquí sobrevuela claramente el retorno a sistemas feudales de organización social.
El cuento de la criada, Margaret Atwood
https://zonapdf.com/el-cuento-de-la-criada-pdf-descargar/
Hay un poco de todo en esta novela feminista: las mujeres reducidas a meros contenedores, parideras de un estado teocrático y totalitario dominado por hombres. Tras el aparente simplismo de la trama se esconden profundas reflexiones de una de las grandes escritoras del siglo XX. Siempre he pensado que determinados planteamientos religiosos esconden de hecho un retroceso social significativo, en este caso centrado en la mujer como sujeto sojuzgado. No he visto la serie televisiva


Sueñan los androides con ovejas eléctricas, Philip K. Dick:
Una de las más conocidas novelas de un autor de culto; personalmente aconsejo pasar por él para disfrutar de la ciencia ficción. De todas maneras decir que ha sido fagocitada por la versión libre que montó Ridley Scott, Blade Runner, una gran película un poco por todo: interpretación, banda sonora, efectos especiales, ambientación... Pese al tiempo pasado es un autor que aguanta y a día de hoy sigue siendo aún una lectura estimulante.



Fahrenheit 451, Ray Bradbury:
Otro clásico de la ciencia ficción distópica que sirvió para una excelente versión cinematográfica de François Truffaut en 1966. Para mí es una consecuencia directa de una lectura atenta -y tremendista- de la gran tesis de Marshall McLuhan, La Galaxia Gutemberg, anunciando y enunciando la hipótesis de la "aldea global" que tanto se está poniendo en solfa ahora mismo con la pandemia del coronavirus. La obra de McLuhan la leí con calma y notas en mi época de universitario persiguiendo entender la primacía de lo visual sobre lo alfabético y el fin de la Ilustración (vanguardias ilustradas / Mass media).


Guerra mundial Z, Max Brooks:
Una novela interesante un poco por todo, exponente de la mayoría de edad del subgénero zombie. El resumen que proporciona wikipedia de la obra no tiene desperdicio por los evidentes paralelismos con la pandemia actual. La película va por libre, interesante aunque solo adopta algunos contenidos de la novela, que pretende ser una crónica desapasionada, una visión culta que recopila  varios puntos de vista de la pandemia zombie en el planeta en un momento determinado. No recomiendo la serie televisiva de idéntico título, que además de no seguir para nada la novela me parece bastante deleznable.


Pese a que la hipótesis subyacente parece ser que carece de fundamento (se presupone la supervivencia de la especie tras una guerra nuclear mundial) la novela relata la evolución desde cero de una pequeña comunidad en la américa profunda. Tiene un final a lo Jack London. Me resultó muy entretenida hace ya mucho tiempo. 





El sueño de la aldea Ding, Yan Lianke
Novela apocalíptica de un autor chino de culto. Estoy leyéndolo ahora mismo así que me abstendré de hacer cualquier observación
Imágenes:
Cabecera. Creador: stokkete
Imagen propiedad de: Getty Images/iStockphoto
Frescos de Luca Signorelli,  El Infierno y La resurrección de la carne respectivamente